El primer paso para una piel sana es la limpieza facial, si no se realiza correctamente todo lo que se haga después pierde su efecto.
Los 3 pasos imprescindibles por la noche son:
- Pre-limpiador:
El pre-limpiador está más enfocado a eliminar el maquillaje, protector solar y cremas que hayamos usado durante el día. - Limpiador:
La limpieza es un paso que a veces nos puede dar pereza, pero en muchos sentidos es la acción más importante.
Está enfocada en la limpieza más profunda de la piel y nos asegura que no quedan residuos de suciedad ni polución y que la piel esté preparada para repararse correctamente durante la noche.
(En mi post sobre limpiadores, puedes mirar cuál sería el más adecuado para tu tipo de piel).
- Hidratación:
Es esencial hidratar la piel después de la limpieza.
¡No te puedes olvidar de este importante paso!
Existen cremas hidratantes faciales para todo tipo de pieles.
Siempre hay que valorar cada piel individualmente, pero para que os hagáis una idea, os expongo algunos ejemplos:
Piel grasa
- Leche limpiadora.
- Gel limpiador e hidratante en textura gel.
Piel mixta
- Leche limpiadora o aceite (según si notáis la piel más o menos deshidratada).
- Espuma limpiadora e hidratación con textura crema-gel.
Piel seca
- Aceite limpiador o bálsamo.
- Limpiador suave en espuma para pieles secas e hidratación en textura crema más untuosa.
Piel sensible
- Leche limpiadora.
- Gel especial para pieles sensibles e hidratación en textura gel.
¿ Cumples los 3 pasos cada día ?